La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

!Hola de nuevo!

En Buenos Aires, el barrio de la Boca puede definirse con tres palabras; Tango, Caminito y La Bombonera.
La Boca es un lugar a destacar en la historia de la Agentina por tres razones: la primera, la Boca es el lugar donde nace el Tango. La segunda porque fue el destino de acogida de los emigrantes europeos del siglo xx, y por último por dar cobijo al estadio de la Bombonera, del equipo Boca Juniors, en otras palabras, la pasión hecha fútbol.

Introducción

El barrio de La Boca está situado en el límite sudeste de la ciudad. Su nombre se debe a que en esta zona se encuentran “las bocas” del Riachuelo, lugar donde sus aguas desembocan en el Río de la Plata. Además, muchos historiadores coinciden en que La Boca es el sitio en donde Pedro de Mendoza fundó la ciudad de Santa María de los Buenos Aires, en 1536. Durante varios años, la boca del Riachuelo fue el puerto natural de Buenos Aires.

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Comienzo de la Calle Caminito en la Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

A fines del siglo XIX comenzó a instalarse una comunidad italiana con preponderancia de origen genovés que, poco a poco, fue dándole vida y personalidad al barrio. Con el tiempo se incorporaron otros grupos de inmigrantes, españoles, griegos, alemanes y algunos dispersos grupos de franceses y sajones. Estos inmigrantes llegaban a Argentina en el siglo xx para trabajar en las fábricas de procesamiento de carne y en el puerto. Los boquenses, con la pintura que sobraba de remozar sus barcos, empezaron a decorar las fachadas de sus casas. Cuando se acaba la roja, se empezaba con la verde y después, con la amarilla. Casi sin quererlo, el barrio había adquirido una personalidad propia y el color esperanza ponía el contrapunto al pesimismo por la falta de oportunidades.

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Casas coloridas de la Boca, pintadas de colores por los inmigrantes que llegaban a la ciudad. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Entre otras razones, el barrio de La Boca es también conocido por albergar el famoso estadio de Boca Juniors, «La Bombonera», donde ‘El Pelusa’ empezó a maravillar al mundo. La Boca son colores, tango, pobreza, artesanía, arte callejero, turismo y, por supuesto, Maradona.

Nadie que vaya a Buenos Aires se puede quedar sin pasear por su Caminito. La Boca y en concreto Caminito es la cuna del Tango. Este el callejón más famoso de La Boca: este callejón huele a Tango, debido a que el tango Caminito (1926) se convirtió en todo un mito. Este callejón tiene unos 150 metros de longitud y es habitual entrar en el caminito Tango Bar Café Arte, donde se puede ver un centro de exposiciones de arte.

En La Boca convive la Buenos Aires más humilde con las hordas de turistas que buscan fotografiar las coloridas casas de su callejón más famoso.  Cierto es que visitar La Boca no es sinónimo de patearla de arriba abajo como sucede en Palermo, Recoleta o San Telmo. De hecho la recomendación es no apartase de las calles que rodean a Caminito, ni mucho menos cruzar al otro lado del Riachuelo.

Nosotras le dedicamos una mañana entera porque al menos merece eso. Llegamos temprano en autobús con el barrio casi desierto y nos despedimos cuando decenas de turistas ya habían invadido los apenas cien metros de Caminito.

Cómo llegar a La Boca

A la Boca no llega el Subte (metro).

  • Desde la Avenida Paseo Colón (barrios de Monserrat y San Telmo) se pueden tomar alguno de los colectivos de la línea 33 o de la línea 64 que circulen hacia La Boca.
  • Desde la calle Bolívar, también en Monserrat y San Telmo, pueden tomar el colectivo 29 hacia La Boca. Os pongo a continuación en el mapa el recorrido que hace el bus 29.

    Bus 29 que te lleva a la Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

  • No hay trenes ni líneas de subte que vayan hasta Caminito, en el barrio de La Boca. Es una buena opción usar el subte para acercarse a la Plaza de Mayo y, desde allí, usar alguno de los colectivos antes mencionados.

Caminito, un tango hecho calle

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Aquí estoy yo posando en la esquina de Caminito. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Dentro del barrio de La Boca, la calle Caminito es una exposición al aire libre de artistas locales, enmarcada por las viejas casas de los inmigrantes que llegaron a Buenos Aires a principios del siglo XX. Hoy en día esta pequeña calle es el símbolo de los orígenes del tango y de la fuerte personalidad de esta parte de la ciudad.

Caminito es un callejón, de unos 150 metros, por donde pasaba una antigua vía del ferrocarril. En 1959 fue declarado Museo a Cielo Abierto, ya que allí se reúnen muchos artistas para exponer sus obras. En esta calle y alrededores pueden verse algunas de las casas construidas con chapas acanaladas y pintadas de varias colores.

En la actualidad suelen ser talleres de pintura y arte en general, bares o museos, pero antiguamente eran las casas de los inmigrantes o conventillos, covertidos en Museos que deberíais visitar.

Los faroles viejos, las calles adoquinadas, las casas de colores, los bailarines de tango que posan para la foto, y todo el arte de murales hacen que Caminito, en el barrio de La Boca, sea algo diferente a lo que se ve en otros barrios de Buenos Aires.

Caminito es también el nombre de un tango de Juan de Dios Filiberto cuya letra se puede ver en una de las placas de esta singular calle.

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Caminito, nombre de un tango de Juan de Dos Filiberto, en La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts.

Caminito es también el lugar más especial de la Boca, donde ver a bailarines de Tango bailando en la calle y varios espectáculos de flamenco, que los verás publicitados por todas partes.

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Bailarines de Tango en Caminito. Foto de Internet

Boca, un barrio lleno de arte 

En La Boca hay murales, leyendas, puestos de artesanía… Arte en definitiva. Arte del pueblo sin patrones ni reglas. Arte espontáneo que ha logrado el reconocimiento y la admiración.

A continuación veréis el mapa del barrio de La Boca donde aparecen indicados los lugares de los que hablo en esta entrada

Letreros típicos del estillo de La Boca. Hay mucha artesanía y muy colorida para comprar en Caminito y calles aledañas. Foto de Barbiegirl Travels Arts

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Postales de Tango en la calle Caminito de La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Desde personajes desconocidos hasta algunos que se asemejan a Eva Perón o al Papa Francisco aparecen en las casa de La Boca, las figuras miran a los visitantes desde los balcones y ventanas de Caminito. Foto de Barbiegirl Travels Arts

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Casas de hojalata de Caminito, La Boca, muchos conventillos convertidos en museos o talleres de arte, Buenos Aires. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Existen en la zona varios ateliers de artistas que se pueden visitar. Uno de ellos es El Rincón de Lucía, ubicado en la esquina de las calles del Valle Iberlucea y Olavarría, en un viejo conventillo restaurado construido en 1876.

La Boca: Tango, Caminito y La Bombonera

Atelier Belesa. Un atelier de artistas a visitar en La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Otro atelier que se puede visitar es el que se ubica en la calle Magallanes 861, un antiguo conventillo convertido en un paseo de compras y donde es posible ver a los artistas en sus ateliers.

Este es uno de los 14 conventillos con fines culturales que se encuentra en tan sólo 100 metros.

Junto con Caminito, la calle Magallanes es un rincón del barrio que se convirtió en un importante circuito cultural. Allí decidieron instalar sus estudios 60 artistas plásticos, los primeros hace ya diez años. Formaron un grupo de amigos y, tiempo después, una asociación civil llamada «Magallanes, calle de los artistas».

Conventillo Magallanes 861 convertido en un atelier de artistas a visitar en La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Museo Quinquela Martín

Un personaje siempre presente en La Boca es Benito Quinquela Martín, quien fue uno de los pintores más reconocidos de Argentina y un popular pintor de puertos. Su memoria es homenajeada tanto en murales como en estatuas, y se lo puede encontrar en más de un rincón del barrio.

Benito Quinquela, el pintor del barrio boquense, dijo en su momento; “un buen día se me ocurrió convertir ese potrero en una calle alegre”. Así nació Caminito.

El Museo Quinquela Martín, en el que se visitan dos pisos con obras del artista y de algunos otros artistas invitados. Además, es posible subir a la terraza desde donde se tienen buenas vistas del barrio y el río.

También se pueden ver mascarones de proa. Quinquela Martín fue uno de los pintores que mejor retrató la vida en el barrio y el duro trabajo de los inmigrantes en el puerto. La entrada es de 10 pesos argentinos.

Obra de Quinquela Martin en La Boca. Foto de Internet

Grafittis

El arte callejero en La Boca expone los sentimientos de los marginados que habían sido residentes del barrio desde sus orígenes. Los impresionantes murales de graffiti muestran la gran pasión y la mitología de La Boca.

Grafittis de Bienvenida a La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Grafittis de Bienvenida a La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

El 23 de agosto de 1870, La Boca obtiene sus límites fundacionales, separada de San Telmo y Barrancas, y se da el primer Juzgado de Paz a cargo de Sebastián Casares pero la República de la Boca duró poco, hasta la intervención represora del presidente Roca.

En 1882 un grupo de genoveses firmó un acta que enviaron al rey de Italia comunicándole que habían constituido la República de la Boca. La I República de La Boca se creó con el fin de defender los intereses de la gente del barrio, que era apuntada por el gobierno argentino, y promover el esparcimiento y la cultura en diversos eventos festivos. Al enterarse de esta noticia, inmediatamente, el entonces presidente, Julio Argentino Roca hizo quitar la bandera genovesa izada en el lugar y puso fin al conflicto.

En 1923, Quinquela Martín impulsó la refundación de la II República de La Boca. Tuvieron lugar grandes fiestas y desfiles callejeros de los que participaban todas las personas del barrio.

Graffiti República de La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts.

Conventillos de La Boca

Entre fines del siglo XIX y principios del siglo XX, la Argentina en general, y Buenos Aires en particular, recibió una gran cantidad de inmigrantes, muchos de ellos originarios de Italia y España, aunque también había de Rusia, Polonia, Ucraniana y Portugal, entre otros.

Conventillo Magallanes 861, Buenos Aires. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Eran inmigrantes dispuestos al sacrificio por algo de bienestar. El 60% se instaló en Buenos Aires, donde en 1919 había 2.470 conventillos habitados por 148.393 personas. La ciudad, apretada en el centro urbano, comenzó a expandirse. Creció en todos los sentidos gracias al tendido de vías. Muchos recién llegados se instalaron en La Boca a partir de septiembre de 1870, cuando el empresario Federico Lacroze puso en funcionamiento el tranvía que llegaba a ese barrio desde Plaza Once.

Muchos de ellos terminaron trabajando en el puerto de la ciudad y vivían en la zona de La Boca, en los llamados conventillos.

Como en otros barrios, el déficit habitacional encontró una precaria solución en las casas de inquilinato. Se llamaron conventillos por la similitud con los conventos, debido a las pequeñas celdas donde viven los monjes.

Para que fuera un conventillo, una casa debía cumplir ciertos requisitos municipales:

  • Ser hogar de por lo menos cinco familias y contar con baños, lavatorios, letrinas y lavaderos comunes.
  • La norma municipal establecía que los cuartos de los conventillos no podían tener menos de 12 m2 y 3,5 m de altura.
  • Cada familia se apretujaba en el mismo cuarto que a veces se dividía con biombos o cortinas.
  • Los patios eran el centro de reunión general. Allí convergían los inquilinos y se enteraban de todo lo que pasaba en el inquilinato. Por eso al chismoso se lo llama conventillero.
  • Las familias compartían baños y lavadero. La mayoría no tenía cocina y la gente se las arreglaba con braseros. El patio central era el lugar de encuentro comunitario.

Conventillo Magallanes 861 de La Boca, Foto de Barbiegirl Travels Arts.

A diferencia de los conventillos de otras zonas, los que hubo en La Boca se construyeron con maderas y chapas de cinc.
Para entender la magnitud, en 1904 más de 16000 personas vivían en los 331 conventillos de La Boca. La superpoblación de Buenos Aires llegó a tal punto, que hubo temporadas en las que uno de cada cinco habitantes de la ciudad vivía en casas de inquilinato. Esa es razón más que suficiente para que este tipo de patrimonio arquitectónico sea tan valorado como lo son las mansiones del 1900.

Hoy en día los conventillos siguen funcionando  y en cada inquilinato viven de 8 a 12 familias. Algunos conventillos tienen dueños legales que alquilan las piezas con contratos. Otros tienen situaciones irregulares y el alquiler es cobrado por personas que no son necesariamente sus dueños. Es que la mayoría son objeto de sucesiones problemáticas o están intrusados. Y los inquilinos se quejan porque les piden cada vez más dinero por piezas en construcciones con problemas estructurales. Una habitación de 12 m2 cuesta entre $ 1.200 y $ 2.000. Originalmente no tenían baño, pero con el tiempo se los incorporaron.

También como hedicho más arriba,  muchos de estos conventillos sirven hoy en día como galerías comerciales y son de acceso público. Si tienes suerte, probablemente encontrarás a alguien tocando música ¡dentro de uno!

La Bombonera

El fútbol en Argentina es un espectáculo aparte. Sobre todo si se tiene la suerte de poder ver a uno de los grandes clásicos: Boca-River. Si cuando están de paso no hay ningún partido previsto, bien vale la pena dar un recorrido por el estadio.

Después de caminar las calles más turísticas de la Boca, apareció La Bombonera, destacando por altura entre casas y fábricas de techos bajos, y protegida por una antigua vía de tren abandonada, y es que no se puede entender el barrio sin su icono más internacional, hogar de Boca Juniors, y cancha de mitos como Maradona, Palermo, o Riquelme.

La Bombonera, Estadio del Boca Juniors

Tiene una de las hinchadas mas calientes del mundo, donde se vive con una pasión desaforada cada partido. Sus gradas, colocadas en una posición más vertical de lo que es habitual, dotan al juego de un vértigo especial. La Bombonera es que no se parece a ningún campo. Si te interesa conocerlo, puedes entrar y verlo.

El Club Atlético Boca Juniors cuenta con un museo conocido como Museo de la Pasión Boquense. El museo funciona junto al estadio y en su interior se puede apreciar la historia deportiva del club por medio de fotografías, trofeos y copas, camisetas, estatuas y curiosidades.

Maradona, personaje principal de los grafittis de La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Museo de la Pasión Boquense y visita al estadio

De lunes a domingo: de 10 a 18 hs.

Importante: cuando Boca juega de local no abre el museo ni hay visitas al estadio.

Facebookwww.facebook.com/MuseodeBoca

La visita al Estadio de Boca tiene 3 opciones:

  • Museo de Boca: es el lugar donde se expone gran parte de la historia del club, con camisetas históricas, trofeos, copas, fotos y testimonios de jugadores.
  • Vista Express: visita rápida al sector del campo de juego.
  • Estadio Tour: un recorrido completo por los diferentes sectores del estadio, como tribunas, palcos, sala de prensa, vestuarios y campo de juego.
  • Precio: consultar en la web.

Dónde comer

La Perla, Café Notable

Este  bar notable, ubicado en Avenida Don Pedro de Mendoza 1899, desde su interior tenemos la posibilidad de ver tanto la ribera del Riachuelo, la Vuelta de Rocha, como el comienzo del histórico Caminito. Abrió en 1882.

La perla, Café Notable en La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Sus Paredes están cubiertas de carteles de chapa como los de la entrada con frases como: “Mi Buenos Aires querido” y “Milonga, bien criolla y bien gauchita» . También hat retratos por doquier de personajes ilustres como Gardel, Francisco Canaro, Enrique Santos Discepolo, Benito Quinquela Martin, Che Guevara, Papa Francisco, Diego Maradona y Lionel Messi.

Si no se quiere tomar algo, vale la pena entrar sólo para mirarlo. Se puede conocer parte de su historia y ver fotos en este link. Es un lugar muy pintoresco que vale la pena entrar. La comida es normal y los precios algo elevados. Aquí tenéis el link de Trip Advisor

Chorizos asados en las calles de La Boca. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Sea donde te sientes a comer vas a encontrar mucha variedad, desde parrilla de picada, asado, pizzas, chorizo criollo, choripan, bife de chorizo, de lomo, etc. Sin duda prueba la carne porque es un espectáculo aunque el pescado y cazuelas de marisco también está buenísimo.

El Gran Paraíso

En Garibaldi 1428 , muy cerca de Caminito encontrarás este precioso restaurante.  En el patio de El Gran Paraíso se mantiene un conventillo que data del año 1890.  Es una construcción de chapas y maderas antiguas que conserva su estilo original. Se pueden visitar las habitaciones de la Planta Alta disfrutando de una maravillosa vista de Caminito.

Es un buen lugar donde desgustar las especialidades de parrillas argentinas. Aquí puedes entrar a su web.

Antiguo Conventillo de restaurante Gran Paraíso

Pinchando Aquí podéis  ver los 10 mejores restaurantes de la Boca según TripAdvisor, estando Gran Paraíso en cuarta posición.

Espero que os haya interesado esta entrada. Es realmente bonito y pintoresco este barrio de Buenos Aires. Si queréis seguir leyendo acerca de mi viaje por este país, puedes pinchar aquí

En breve seguiré hablando de la capital de Argentina Buenos Aires.

!Hasta pronto!

 

 

 

 

« | »

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *