Ruinas nabateas de Hegra en Arabia

Buenas viajeros,

Este post de Saudi está enfocado en la ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita. Ubicadas al al norte del desierto de Al-Ula, también conocidas como Mada’in Saleh, Hegra fue un próspero centro de comercio internacional en la época de los nabateos, siglo IV a. C. al I d. tan importante o casi como su vecina Petra, en Jordania.

Jabal Al Banat, complejo de 29 tumbas nabateas en Hegra, Arabia Saudita. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Introducción a las ruinas de Hegra en Arabia

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Posando en Qasr al-Farid, la tumba más conocida de Mada’in Saleh. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Las autoridades saudíes tomaron la decisión de dar a conocer este alucinante yacimiento en el 2019, presentándola como como la hermana arqueológica de la ciudad de Petra, en Jordania. Coincidiendo con la decisión de dar visas para el turismo internacional más allá de visitas comerciales o religiosas, Hegra destaca por contener las ruinas de una civilización casi borrada por el viento del tiempo.

De hecho, Hegra fue la segunda ciudad del reino nabateo, después de Petra. Además de Petra, Mada’in Saleh o Hegra es uno de los pocos vestigios que quedan de la civilización nabatea. Su época de mayor esplendor abarca del siglo IV a. C. al I d. C). Los nabateos son posiblemente una de las civilizaciones más enigmáticas e intrigantes de las que se tiene registro, ya que se sabe muy poco de sus costumbrescosmovisión y estructura socio-política.

Gran parte del atractivo de Hegra se debe al hecho de que es un destino prácticamente desconocido para los extranjeros. En contraste, su homólogo jordano Petra recibe cerca de un millón de visitantes al año. Sin embargo, el impacto del yacimiento de Hegra en el desierto de Al Ula en Arabia ha sido tal, que hoy la UNESCO ha distinguido a Hegra como el primer lugar del país declarado Patrimonio de la Humanidad en peligro de extinción, si no recibe el mantenimiento adecuado.

Datos de Hegra en Arabia y Petra en Jordania

  • Mada’in Saleh o Hegra se encuentra a 20 km al norte de la ciudad de Al Ula, en el alucinante desierto del mismo nombre, del que os he hablado Aquí (pincha encima)
  • Unida a Petra, Jordania, por tan sólo 584 kms, todo un mundo las separa, además de una frontera difícil de atravesar para los occidentales. Jordania y Arabia son dos países muy diferentes con mentalidades opuestas. Jordania es el país con la sociedad árabe más abierta del entorno y le lleva una ventaja a Hegra en Arabia Saudita, de unas cuántas décadas de progreso, avance y apertura al turismo.

  • La ciudad de Petra en Jordania, cuna de la civilización nabatea y Patrimonio de la Humanidad desde 1985, fue descubierta para los occidentales por el explorador suizo Johann Ludwig Burckhardt, en 1812. Bajo el dominio nabateo, es a partir del siglo Vi AC, cuando fue concebida como una ciudad funeraria, que ellos mismos bautizaron como «ciudad para el día de mañana». En el siglo vi d.c sus habitantes abandonaron la ciudad y ésta cayó en el olvido, hasta ser redescubierta en el siglo xix. Aquí os dejo el post que escribí en su día, relativo al viaje que hice por Jordania en 2011, visitando Petra durante 2 días.

Petra, la ciudad tallada en rosa

  • Se cree que Hegra fue una importante ciudad de la época nabatea, comunidad de nómadas que vivían en el desierto. Fue enclave de la ruta comercial entre la península arábiga, la zona mediterránea y Asia. Entre los siglos IV a.C. y el I d.C. Hegra debió de destacar como enclaves que controlaban las rutas comerciales de incienso y especias. Dominaron las rutas comerciales a través de Arabia y Jordania hasta el Mediterráneo, Egipto, Siria y Mesopotamia.  Tras el abandono de la ciudad nabatea, la ruta continuó desempeñando su papel como un bullicioso paso comercial y de caravanas, transitado por los peregrinos que se dirigían a La Meca hasta el siglo XX, cuando se construyó el ferrocarril del Hiyaz. 
  • Como último apunte, además de Petra en Jordania, Hegra podría competir también con las ruinas de Naqsh e Rostam, la llamada Petra de Irán. Equivalente también al Valle de los Reyes en Egipto, Naqsh e Rostam es una gran necrópolis de los reyes de su dinastía más poderosa (pincha encima para leer más). Este es un magnífico lugar en medio del desierto donde, a través de sus grabados, se pueden llegar a entender parte de la historia de la época aqueménida (560 ac-330 ac).

    Ruinas de Naqsh e Rostam, la llamada Petra de Irán. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Visita de Hegra o Mada’in Saleh, Arabia

  • Las ruinas nabateas de Hegra en Arabia cuenta con un aproximado de 111 tumbas perfectamente conservadas, aunque solamente van a enseñarte unas poquitas, en unas 5 paradas. En las tumbas todavía se observan referencias al autor de la misma y la persona sepultada en ella.
    Esta ciudad esconde tras sus impresionantes portadas talladas en la arenisca una espectacular excavación de más de 13 kilómetros en donde no faltan palacios, murallas, torres y templos esculpidos en la piedra donde aún se pueden leer inscripciones en algunas de ellas datadas y fechadas hacia el segundo milenio antes de Cristo.
  • Durante la visita a Mada’in Saleh, te transportan en jeep a través del yacimiento y en 5 paradas, podrás conocer los puntos más importantes donde ver las tumbas nabateas. No podrás abandonar el jeep ni hacer la visita por tu cuenta.
Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Jeeps en los que visitas el yacimiento de Hegra, Arabia Saudita. Foto de Barbiegirl Travels Arts

  • Para explorar las ruinas nabateas de Hegra en Arabia, hay que comprar una entrada para realizar una visita guiada de únicamente 2 horas. Por el momento, no hay otra opción. Puedes comprar los tickets de entrada al yacimiento en esta web de Experience Al Ula, (pincha encima) por un precio de 95 SAR (al cambio 24 eur)

Posando en la entrada al yacimiento de Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

  • Este testimonio de la civilización nabatea ocupa un entorno impresionante. Mucho más espectacular que el entorno de Petra. Aquí es imposible caminar de una tumba a otra; necesitas ir en jeep por la distancia que hay entre ellas. Este yacimiento se erige ahora como una impresionante ciudad de piedra con más de cientos de tumbas artísticamente talladas y bien conservadas que decoran los salientes de arenisca. Estos barrancos escarpados crean una mezcla cautivadora de estructuras y se alinean con tallas artísticas e inscripciones que evocan a la arquitectura antigua.
Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Espectacular paisaje que disfrutarás al explorar en Jeep yacimiento de Hegra, Arabia Saudita. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Espectacular paisaje y luna en el yacimiento de Hegra, Arabia Saudita. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Espectacular paisaje que disfrutarás al explorar en Jeep yacimiento de Hegra, Arabia Saudita. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Qasar al-Farid, el «castillo solitario» de los nabateos, Foto de Barbiegirl Travels Arts

Qasr al-Farid

La primera parada de la visita a las ruinas nabateas de Hegra en Arabia está dedicada a  Lihyan, Hijo de Kuza, a veces llamada Qasr al-Farid. Es la más grande, siento un monolito de unos22 mts  de altura. Qasar al-Farid, el «castillo solitario» de los nabateos, se encuentra a gran distancia del resto de las tumbas y de ahí el nombre de «solitario». Quedó sin finalizar

Qasar al-Farid, el «castillo solitario» de los nabateos, Foto de Barbiegirl Travels Arts

Mientras la mayoría de las fachadas de Madain Saleh se decoran con dos pilastras a cada lado de la fachada esta presenta dos columnas nabateas en la parte baja. La tumba tiene una inscripción en la que se lee «Para Hyyan bin Kuza y sus descendientes».

Qasr Al Farid es la tumba de Lihyan, hijo de Kuza, perteneciente a  familia nabatea muy importante.

Jabal Al Banat

Jabal Al Banat alberga el mayor grupo de tumbas con más de 100 sepulcros monumentales, 29 de ellos tallados en todas las caras de la roca de arenisca. Este es uno de los grupos de tumbas más grandes de Hegra, muchas de ellas fueron propiedad de mujeres o fueron encargadas por ellas.

Si te fijas bien, puedes ver inscripciones de protección de las tumbas o leer las amenazas a quienes profirieran insultos u osaran saquearlas.

Según la tradición antigua, ésta es la leyenda detrás de Jabal Al Banat. El montículo donde se erige «Al Banat”, pertenecía a una joven. Su padre quiso protegerla y allí mismo le construyó una habitación bajo el montículo, donde ella cantaba y se cepillaba el cabello. Pero la joven se sentía sola. Cuando su padre partió de viaje, un atractivo hombre apareció atraído por sus cánticos y fue amor a primera vista. La joven, atraída por el apuesto hombre, acabó enamorándose y la pareja concibió un bebé.
A su regreso a Hegra, el padre de la joven se enteró del embarazo y acabó con la vida de los amantes. Una de las rocas tiene un tinte rojo, que la gente ha dicho que era sangre, pero en realidad es una reacción química al hierro de la roca.

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Jabal Al Banat, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Jabal Al Banat, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Jabal Ithlib

Llegando a Jabal Ithlib, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Al este de la ciudad de Hegra se encuentra Jabal Ithlib, una falla natural en las rocas que permite su paso hacia otra estancia. En esta zona se han encontrado una serie de santuarios, marcadores rituales y lugares de reunión del período nabateo.

Jabal Ithlib, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

A la izquierda del pasaje, incrustados en la pared rocosa, hay numerosos tallados verticales en piedra que representan deidades nabateas. Enfrente, a la derecha del pasaje, hay un gran salón excavado en las rocas, conocido como el Diwan. El Diwan era una especie de comedor conocido como triclinio, en el que probablemente se habrían celebrado banquetes rituales o de élite. 

El Diwan es el ejemplo más grande de un espacio de este tipo en Hegra, aunque se han encontrado otros espacios similares. Alrededor de las tres paredes hay bancos excavados en la roca, donde los comensales se reclinaban para comer, beber y conversar. El frente abierto del Diwan sugiere una entrada elaborada, pero incluso puede indicar que las actividades que tuvieron lugar allí tenían un elemento público.

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Estancia interior que encuentras atravesando el estrecho Siq desde el Diwan. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Jabal Alahmar

Este es otro complejo de 18 tumbas y debe su nombre al color rojizo de la piedra arenisca con la que se construyeron las tumbas. Durante una parada cortita te explicarán el propósito de este otro complejo funerario, donde puedes incluso puedes entrar a ver las tumbas.

Ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita

Jabal Alahmar, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

Posando en la entrada de una de las 29 tumbas de Jabal Alahmar, Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts.

Hegra. Foto de Barbiegirl Travels Arts

La visita completa de Hegra no va más allá de las dos horas. Sinceramente, resulta algo escaso y además, al no dejarte solo dentro del recinto, no puedes pararte a ver las ruinas con detenimiento o hacer incursiones por tu cuenta. Esto es lo que más se diferencia de Petra donde, al contrario, puedes explorar el yacimiento sin ninguna limitación, subir al Monasterio, entrar en el Tesoro, etc.

Lo que sí impresiona en Mada’in Saleh son las dimensiones. Estamos de acuerdo en que Petra es gigante pero parece estar todo relativamente cerca y se explora a pie. Sin embargo, en Mada’in Saleh es necesario tomar un jeep para poder desplazarte y visitar las tumbas y muy recomendable es hacer la visita a última hora de forma que te coincida con el atardecer.

Las ruinas nabateas de Hegra en Arabia Saudita son un lugar increíble, bellísimo que si vas a Arabia Saudita no debes perderte. Espero que os haya gustado mi viaje por este increíble país con lo que pinchad encima (Arabia Saudita) si queréis leer todos los posts del país.

 

 

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