Buenas viajeros,
Vuelvo al blog para hablaros de otra de las ciudades que visitamos en Afganistán y en concreto de Herat, quedando devastada por los recientes seísmos acontecidos en Afganistán y asolando a su población. Se dice que las desgracias nunca vienen solas y creo que este dicho se aplica a este país al 100%.
Introducción
A las 11:11 hora local del 7 de octubre 2023, un temblor de magnitud 6,3 sacudió la provincia afgana de Herat, en el noroeste del país. Una falla en el extremo occidental de la cordillera del Hindu Kush se rompió, dañando la poblada ciudad de Herat y dejando muchas aldeas rurales en escombros.
A continuación, sólo 23 minutos después, se produjo otro terremoto, también de magnitud 6,3.
Apenas cuatro días después, el 11 de octubre, cuando aún se estaban recuperando cadáveres de entre los escombros, otro seísmo de magnitud 6,3 sacudió la misma región, traumatizando aún más a una población devastada.
El 15 de octubre, el número de muertos había alcanzado casi los 3000, y fue entonces cuando un cuarto seísmo de magnitud 6,3 sacudió la zona.
El día 19 de octubre 2023 llegábamos a Kabul procedentes de Islamabad y al día siguiente, 20 de Octubre, volábamos a Herat, donde nos esperábamos encontrar mucho más desastre del que contemplamos. Para una población como la afgana, acostumbrada a sufrir, encarar una desgracia natural es perfectamente superable.
Herat, epicentro del seísmo
El centro de Herat no parecía estar muy afectado pero las aceras de toda la ciudad estaban tomadas por los vecinos que se quedaron sin hogar, viéndose obligados a refugiarse en las calles de la ciudad de Herat.
Las aldeas remotas más gravemente afectadas son conjuntos de edificios de adobe, ladrillo y madera no reforzados, del tipo que se pliega inmediatamente durante un terremoto fuerte.
Trágicamente, se estima que el 90% de las víctimas (aproximadamente 3000 muertos) fueron mujeres y niños, que tenían más probabilidades de estar dentro cuando se produjeron los seísmos. Los talibanes han restringido el derecho de las mujeres a circular libremente por los espacios públicos, lo que agrava la disparidad de víctimas.
No tengo muchas fotos de la gente viviendo en la calle porque no me pareció lícito hacerlas pero lo que realmente impactó fue ver la entrada a la mezquita de la ciudad, que me recordó tanto a las iraníes, repleta de tiendas de campaña. La mezquita y la ciudadela de herat, lugares de interés cultural de la ciudad, recibieron múltiples daños en su arquitectura pero no se han venido abajo.
Lugares de interés en Herat
La ciudadela de Herat
No pudimos entrar a ver la Ciudadela de Ekhtiyaruddin, conocida también como la Ciudadela de Alejandro, uno de los lugares más espectaculares de la ciudad. No me acuerdo bien si fue porque los talibanes no nos dejaron entrar o por los daños provocados por el seísmo. Fuera por una cosa u otra, tuvimos que conformarnos con verla por fuera.
Los escritos ya hablan de la ciudadela en el 330 a. C., cuando Alejandro Magno y su ejército llegaron a lo que hoy es Afganistán después de la Batalla de Gaugamela.
Herat era una ciudad muy importante en la Ruta de la Seda. Las excavaciones han demostrado que la ciudad estaba habitada desde el siglo 6 a.C. Alejandro Magno ocupó la zona en 330 a.C., y se cree que fue él quien construyó la primera fortaleza de la zona. Fue el ejército mongol quien en 1221 destruyó la ciudadela la cual fue reconstruida por la dinastía persa de los Kartid. Muchos imperios lo han utilizado como sede en los últimos 2.000 años y fue destruido y reconstruido muchas veces a lo largo de los siglos. Esta histórica ciudadela se salvó de la demolición en la década de 1950 y fue excavada y restaurada por la UNESCO entre 1976 y 1979. A principios del 2000 se completó su reestauración.
Bazar de Herat
Justo frente a la Ciudadela se encuentra el centro de la ciudad donde nos hicimos miles de fotos con los niños en especial. Se les veía especialmente contentos de ver a occidentales, nada que ver con el ambiente tan tenso y de represión que percibimos en Kandahar.
Literalmente todo el mundo quería acercarse para vernos y especialmente les debíamos de llamar la atención las mujeres caminando por la ciudad, sin apenas cubrirnos.
Mezquita del Viernes
La mezquita Aljama de Herat también conocida como mezquita del Viernes de Herat, Masjid-i Jami’ de Herat, y gran mezquita de Herat, comenzó su construcción en el año 1200 AD y se ubica en la ciudad vieja de Herat. Posteriormente fue ampliada por varios gobernantes según Herat cambiaba de gobernantes durante los siglos: los timúridas, los safávidas, los mogoles y los uzbekos, todos los cuales apoyaron la mezquita. Aunque muchos azulejos han sido sustituidos durante períodos posteriores, la mezquita adquirió su forma actual durante los últimos años del siglo xv.
Es una mezquita muy similar a las que pude ver en mi viaje a Irán y también en mi viaje a Uzbekistán. Destacan los minaretes azules y los azulejos en estos colores, tan bonitos.
La visita estuvo enturbiada por la forma en que nos tuvimos que marchar de este lugar; varios talibanes – debido al revuelo que estábamos causando con nuestra presencia y al hablar con varios niños – nos obligaron a dejar la mezquita y dirigirnos a otro lugar. Una pena porque es un lugar precioso al atardecer. Por otro lado, se nos acercó un afgano que hablaba español y nos contó lo agradecido que estaba a España, donde había vivido muchos años (en concreto en Gijón). el buen hombre tenía una tienda de artesanía junto a la mezquita y nos regaló a las mujeres del grupo unas pulseras (un gran detalle).
Nuestra visita a la ciudad de Herat no fue muy exitosa como veis. No querían extranjeros por ahí que alteren la vida de sus ciudadanos afganos.
En fin, dejamos herat y cogimos carretera hacia Kandahar, donde llegamos 11 horas después hechos polvo, recorriendo unas carreteras destrozadas por la guerra.
Si os interesa este país, desde aquí podéis acceder a todas las entradas de mi viaje a Afganistán.
!hasta pronto!